[vc_row css_animation=”” row_type=”row” use_row_as_full_screen_section=”no” type=”full_width” angled_section=”no” text_align=”left” background_image_as_pattern=”without_pattern”][vc_column][vc_column_text]En la playa de Riva Dei Tarquini, al norte de Roma, en Italia, ya empezó el entrenamiento del equipo de salvavidas caninos. Los voluntarios y los animales cuentan con la ayuda de un labrador negro llamado “Pocho”, que es miembros de la patrulla de la Escuela Italiana de Perros Socorristas.
El can demostró la manera correcta de rescatar a un bañista en peligro. Con chaleco salvavidas incluido, salta al agua sin miedo. En pocos minutos consigue que un hombre atrapado en el mar llegue a la costa con seguridad.
La iniciativa se ha extendido por todo el país. Ahora mismo, hay 400 voluntarios, entre perros y dueños, que están trabajando en las costas italianas y realizan alrededor de 40 rescates cada año.
Las escuelas especiales de entrenamiento canino comenzaron a enseñar hace dos décadas. Aceptan cualquier raza de perros pero los labradores son los que mejor se adaptan. Su naturaleza tranquila resulta clave para personas nerviosas en situación de peligro.
Hoy, los canes se han convertido en un instrumento valioso durante la pandemia del coronavirus, ya que evitan el contacto de humano a humano y, por ende, el contagio durante el rescate.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]