
La situación de la caficultura ecuatoriana se torna cada año más preocupante.
La poca producción en las fincas y los bajos precios internacionales son los principales problemas.
La Asociación Nacional de Exportadores de Café estima que las ventas externas del productor, en este año, llegarán a los 60 mil sacos de 60 kilos.
Es decir, un 25% menos que en 2017, año en que e país exportó 80 mil sacos.